La ilusión de los seguidores: influencers que no influencian y marcas que le venden al viento

Después de trabajar con dos de las cadenas de farmacias más grandes de Centroamérica, aprendí una lección que hoy comparto como recomendación a cualquier marca: no te dejes engañar por los números vacíos.

Podés tener miles de seguidores, millones de views o influencers con audiencias gigantes… y aun así, no mover un centímetro tu market share. El error es común: muchas empresas caen en la ilusión de los likes, compran seguidores o invierten en influencers que no influyen en nadie. El resultado: un marketing que luce bien en un reporte, pero que no sostiene la caja.

Las 3 grandes ilusiones digitales

1. Seguidores comprados

Son fáciles de detectar: cuentas con 100,000 followers y 30 “likes” en sus publicaciones. Sirven para aparentar, no para vender.

• Ejemplo: una tienda online que presume 50,000 seguidores, pero apenas logra 10 ventas al mes.

Recomendación: Mejor 5,000 seguidores fieles que compran, que 100,000 fantasmas que solo inflan tu ego.

2. Influencers sin influencia

Hay perfiles con alcance, pero sin credibilidad. Promocionan 10 marcas distintas en la misma semana y su audiencia desconecta.

• Ejemplo: un influencer de lifestyle que un lunes promociona vitaminas, el miércoles hamburguesas y el viernes servicios financieros. El resultado: su comunidad no confía en ninguna de sus recomendaciones.

Recomendación: elige microinfluencers especializados, con menos seguidores pero con autoridad real en su nicho.

3. KPIs mal definidos

El clásico error: medir éxito en likes o views. Eso es “vanity metrics”.

• Ejemplo: una campaña que genera 500,000 visualizaciones, pero cero leads y cero ventas.

• O peor: promociones virales que aumentan volumen, pero erosionan el margen.

Recomendación: mide con indicadores que impacten caja:

• CTR (Click Through Rate)

• Conversiones reales

• Ventas con código de descuento

• Ticket promedio generado

Cómo preparar la estrategia correcta

1. Define tu objetivo real. No es lo mismo awareness que leads o ventas. Cada objetivo necesita un tipo distinto de influencer o estrategia digital.

2. Elige relevancia sobre alcance. Mejor un microinfluencer con 5,000 seguidores fieles que confían en él, que una celebridad con 1 millón de seguidores desconectados.

3. Exige métricas de negocio. No pagues por “visibilidad”. Pide datos de conversión, tráfico a tu web o ventas directas.

4. Haz campañas de prueba. Proba 1 mes con un microinfluencer. Medí resultados. Escalá solo si genera retorno real.

5. Combina influencer + contenido propio. Tu marca debe crear contenido que conecte, no depender solo de terceros. El influencer es un amplificador, no la base de tu estrategia.

Los seguidores se ven bien en la biografía, pero los clientes fieles se ven en el estado de resultados. No compres ilusiones. Diseña estrategias que generen confianza, comunidad y ventas reales.